Todo está en el blog LOS MIL Y UN VINILOS y en la página de CARLOS CANO.
Para muchos como yo, estos primeros discos son poesía en estado puro. La obra de un autor debe pasar por la prueba del tiempo que calcula la caducidad por el espacio dividido entre la velocidad en que se tarda en olvidar al artista. Sus canciones eran poemas y la poesía no muere jamás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario